Y no me disculpo por la expresión. Vuelven a la carga los de la memoria histórica y la madre que .... No hay problemas en este país, no hay temas actuales que aclarar, no hay injusticias, ni ilegalidades, ni fraudes, ni miseria, ni incompetentes en altos cargos engrosando sus cuentas, ni paro, ni crisis....NADA, NADA DE NADA. Vuelven a la carga, de cuando en cuando, reivindicando...lo que sea, con tal de desviar la atención de lo actual y aprovechar que quienes están al frente les puede venir bien hacerles caso. Ahora, de nuevo en Informe Semanal, reclamando el dinero "rojo" que les quitaron.
Pues bien, mi padre luchó en el bando perdedor, (aunque para mí esa guerra la perdimos todos) yo no tengo ningún papel que justifique el trigo que se nos quitó por los que ganaron, ni la miseria en la que vivió mi gente, ni lo que pasó mi padre en esa guerra que quiero olvidar porque fue una verguenza al principio y al final, y que algunos, interesadamente, no me dejan. ¡Ya está bien! dejad a los muertos en paz. Ocuparos de una vez de los que están vivos. Y no permitid que "los vivos" los que son "unos vivos" os manipulen. Hubo gente que no fue a la guerra, estuvieron de vigilantes de los filatos y cobraron una paga cuando llegaron los que querían restañar heridas a costa de producir otras por agravio comparativo. Dicen que les arruinaron, y a los que no eran ricos y la guerra les hundió infinitamente más ¿quién les paga? Las humillaciones sufridas, primero por unos, luego por los otros ¿quién las paga? Las ilusiones rotas, los sueños truncados, primero por unos, luego por los otros ¿quién las paga? ¡Basta ya! Políticos, medios de comunicación y demás organismos con poder de decir o hacer ocuparos de una maldita vez de este país, aquí y ahora.
Porque hay quien ya menciona que para pagar lo que hay que pagar en este país, aquí y ahora. Hace falta una guerra, y hasta ahí podíamos llegar. Ya nos equivocamos demasiado todos, ¡TODOS! para seguir equivocándonos no solucionando los problemas que hoy, aquí y ahora, tiene este país.
¿Por qué no pensamos en nuestra juventud? parada, sin esperanzas de encontrar un puesto ni medio digno. No se os ocurre a todos los que volvéis y volvéis hacia atrás que nuestra juventud no tiene derecho a soñar, a ilusionarse, a realizarse porque nadie les paga ni un euro por el trabajo que debieran estar haciendo y que no se les permite. ¿Con que ilusión pueden estudiar y formarse ante este panorama? Les estamos robando, como en la guerra lo hicieron los unos y los otros. ¿Quién les pagará a nuestros jóvenes? todo lo que se están perdiendo porque nadie se ocupa de luchar en la batalla de hoy, de aquí y de ahora. Mientras seguimos ocupando el tiempo en hablar de hace un siglo, aquí y ahora, hay gente que vuelve a sentir el hambre, hay gente que se ve en la ruina, hay gente que crece en deseperanza. Hay gente que cae en la depresión porque no es que no vea un ayer limpio y sin errores, no. No es que no vea un mañana que nunca es, no. Es que no ve el hoy.... porque los que tienen el dinero y el poder no se lo dejan ver.
No quiero despedirme de este arranque, provocado por los medios manipulados por intereses poco loables, sin algo más positivo.
Golondrineros, sed felices, vivid hoy porque el ayer ya no existe y el mañana nunca es. Es el, hoy, el que cuenta y por tanto el que importa. Desprenderos de lo supérfluo, atended a vuestra esencia, a vuestro ser, y levantaros cada mañana como si fuese el mejor, porque lo es. Cada día es único, es lo que cuenta. Y no importa si no hay postre o cocacola. A nuestros padres, a nuestros abuelos, la guerra les privó de muchas, de muchísimas cosas y sobrevivieron. Vosotros, nosotros, también lo lograremos (claro que entonces no tenían televisión y no oían lo que oimos hoy)
Baci golondrinero, para todos.
Pues bien, mi padre luchó en el bando perdedor, (aunque para mí esa guerra la perdimos todos) yo no tengo ningún papel que justifique el trigo que se nos quitó por los que ganaron, ni la miseria en la que vivió mi gente, ni lo que pasó mi padre en esa guerra que quiero olvidar porque fue una verguenza al principio y al final, y que algunos, interesadamente, no me dejan. ¡Ya está bien! dejad a los muertos en paz. Ocuparos de una vez de los que están vivos. Y no permitid que "los vivos" los que son "unos vivos" os manipulen. Hubo gente que no fue a la guerra, estuvieron de vigilantes de los filatos y cobraron una paga cuando llegaron los que querían restañar heridas a costa de producir otras por agravio comparativo. Dicen que les arruinaron, y a los que no eran ricos y la guerra les hundió infinitamente más ¿quién les paga? Las humillaciones sufridas, primero por unos, luego por los otros ¿quién las paga? Las ilusiones rotas, los sueños truncados, primero por unos, luego por los otros ¿quién las paga? ¡Basta ya! Políticos, medios de comunicación y demás organismos con poder de decir o hacer ocuparos de una maldita vez de este país, aquí y ahora.
Porque hay quien ya menciona que para pagar lo que hay que pagar en este país, aquí y ahora. Hace falta una guerra, y hasta ahí podíamos llegar. Ya nos equivocamos demasiado todos, ¡TODOS! para seguir equivocándonos no solucionando los problemas que hoy, aquí y ahora, tiene este país.
¿Por qué no pensamos en nuestra juventud? parada, sin esperanzas de encontrar un puesto ni medio digno. No se os ocurre a todos los que volvéis y volvéis hacia atrás que nuestra juventud no tiene derecho a soñar, a ilusionarse, a realizarse porque nadie les paga ni un euro por el trabajo que debieran estar haciendo y que no se les permite. ¿Con que ilusión pueden estudiar y formarse ante este panorama? Les estamos robando, como en la guerra lo hicieron los unos y los otros. ¿Quién les pagará a nuestros jóvenes? todo lo que se están perdiendo porque nadie se ocupa de luchar en la batalla de hoy, de aquí y de ahora. Mientras seguimos ocupando el tiempo en hablar de hace un siglo, aquí y ahora, hay gente que vuelve a sentir el hambre, hay gente que se ve en la ruina, hay gente que crece en deseperanza. Hay gente que cae en la depresión porque no es que no vea un ayer limpio y sin errores, no. No es que no vea un mañana que nunca es, no. Es que no ve el hoy.... porque los que tienen el dinero y el poder no se lo dejan ver.
No quiero despedirme de este arranque, provocado por los medios manipulados por intereses poco loables, sin algo más positivo.
Golondrineros, sed felices, vivid hoy porque el ayer ya no existe y el mañana nunca es. Es el, hoy, el que cuenta y por tanto el que importa. Desprenderos de lo supérfluo, atended a vuestra esencia, a vuestro ser, y levantaros cada mañana como si fuese el mejor, porque lo es. Cada día es único, es lo que cuenta. Y no importa si no hay postre o cocacola. A nuestros padres, a nuestros abuelos, la guerra les privó de muchas, de muchísimas cosas y sobrevivieron. Vosotros, nosotros, también lo lograremos (claro que entonces no tenían televisión y no oían lo que oimos hoy)
Baci golondrinero, para todos.
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