15 abril 2011

NUEVO HOSPITAL LA FE DE VALENCIA. NOVENA SEMANA. BODA DE LUCIA

Bueno, ahí las tenéis, estas chicas son las que no lo consiguieron. (la foto procede de latrola.net)
De esta semana, lo positivo más destacable es la boda de Lucia Igual, nuestra Resi. Hicimos un Ángelus como despedida de soltera y le dimos unas chorraditas. Las estudiantes, futuras auxiliares y enfermeras, trabajaron de lo lindo para llenar la enorme pizarra de la sala de médicos con frases y fotos alusivas al gran acontecimiento que celebrarán mañana. Un alto en el quehacer diario que nos sirvió para reír, relajarnos y completar la formación de las estudiantes. Es importante que aprendan a tener un buen ambiente porque favorece el rendimiento. Desde aquí, el saludo cariñoso y nuestros mejores deseos para Lucia y Danny. Que sean felices y coman muchas perdices.
Soplan mejores vientos por los pasillos de la Nueva Fe, no es que todo vaya bien, pero va mejor y aprovechamos para tratar de solucionar lo que no anda tan bien como quisiéramos. Los pacientes no han sido tan numerosos, pero sí hemos tenido un conglomerado de especialidades, cirugía incluida y, hasta de catorce años han ingresado, cuando la edad máxima no debería superar los cuatro años.
Y es que al gigante sanitario no le importa qué ni dónde. Ingresan en la sala en la que hay sitio. Era de prever que ocurriese, ya que han reducido el número de camas. Eso implica que dan por sentado que todo el mundo es experto en cualquier patología. Me refiero al personal de enfermería, ya que los médicos sólo atienden aquello en lo que son especialistas. Pero las enfermeras y auxiliares son máquinas perfectas, de la más alta cualificación. Lo mismo sirven para un roto que para un descosido. Y es así, pero a costa de un mayor esfuerzo que nada ni nadie compensa.
La reducción de camas era algo que no podíamos comprender y seguimos sin hacerlo. Claro que la natalidad ha disminuido, pero no así la de los inmigrantes. También disminuye la tasa de mortalidad de algunas patología, lo cual supone un mayor tiempo en el uso de las instalaciones hospitalarias.
Y si bien es cierto que todo va encaminado a reducir el tiempo de estancia media, a utilizar más los servicios de las UCSI —cirugía sin ingreso— No menos cierto es que tardaremos aún años en llegar a las cotas deseadas. Pero claro, son previsores, y ya reducen en vistas a ese futuro lejano.
Y para mayor desconcierto de todos, han ubicado despachos en habitaciones de alguna sala. Y es que, por lo visto, no pensaron en hacerlas. Sí, tenemos unos pasillos de carrera de fondo. Espacios amplios con enormes ventanales sin uso ni destino alguno. Inmensos vestíbulos... Pero, faltaban despachos y, para algunos, los han inventado. Otros sin ellos se han quedado.
También siguen faltando algunos muebles y, esta semana la jefa de la sección y una de nuestras auxiliares han ido de compras a un centro comercial y han traído un par de estanterías, que buena falta hacían. Así que montando estanterías hemos estado. Lo que decía, igual valemos para un roto que un descosido.
Hemos acabado la semana con un improvisado hospital de campaña. A una de nuestras enfermeras el cuerpo le ha dado tal malestar que ha sido necesario ponerle un gotero. En la sala de estar, que dicho sea de paso es casi un zulo, la hemos atendido. Con el frasco del gotero pegado con esparadrapo a la pared. Tal cual. El objetivo se ha logrado y la enfermera ha podido seguir trabajando tras el tratamiento. Y es que el esparadrapo sirve para todo, mano de santo en cualquier incidencia.
Sed felices, golondrineros, ciao.

No hay comentarios: