01 mayo 2010

JOSÉ BONO ¿QUÉ PASA CON ÉL?

Eso, ¿qué pasa con Bono? Dicen que si tiene no sé los pisos, que si las reformas las pagó otro, que si patatín, que si patatán.

Vale, lo que quieran, ya se verá, si es que llega a verse, si hay o no aumento indebido de patrimonio.

A mí, el señor Bono, no me cae mal. Quizá deba decir: que me cae bien casi siempre, algún momento no. Me gusta su manera de enrollarse, de dejar caer las cosas como sin querer, aunque con toda la intención del mundo.

Me hace gracia su forma de estar, aquí, sin dejar de estar allá o mucho más lejos aun. Creo que tiene su propio lugar que no se corresponde ni con los unos ni con los otros, por más que diga. Perdió el tren que quería tomar, el de ser presidente claro está. Ha logrado ser “presidente” aunque no en la presidencia a la que aspiraba.

Tiene cualidad de político, un poco o un mucho de cuco. Tonto no es, eso está claro. Sabe ser conciliador, aunque si se lo propone es capaz de liar al más templado. No carece de sentido del humor y conoce el refranero. Avispado, eso también lo es. En fin, para el oficio que ejerce le va bien todo eso y usa de ello.

Pero volvamos al principio, que si patatín, que si patatán. Yo no sé nada, ya se sabrá, al final todo se aclara. Cuando se quiere aclarar.

Pero a mí lo que me tiene con la mosca detrás de la oreja es: su look. ¿Os habéis fijado?

El señor Bono, cercano a los sesenta, acaba de rejuvenecer. Le ha crecido el pelo considerablemente y algo, me parece, le han hecho en la cara. Una imagen vale más que mil palabras y, el señor Bono, a pesar de que palabras tiene más de un millón, ha mejorado su imagen. Así no habrá quien le pare.

¿A dónde va? Porque eso no es por nada. Y no creo que sea sólo para distraer la atención de otros temas de suma importancia. No, esta vez no es para distraer. Ni tampoco para distraerse.

¿Por qué un hombre cambia su look? A su edad y con el cargo que tiene, aunque sea coqueto, que lo es o por lo menos lo parece. Solo hay, a mi entender, dos motivos posibles:

  1. Aspira a un cargo mayor. Pensemos en otra “presidencia”

  2. Tiene una amante “joven”.

Pensamientos en una noche de primavera, que la sangre altera. Y algo de lo que he dicho puede ser cierto, pero también, qué duda cabe, podéis pensar que es todo invento.

Buenas noches golondrineros, sed felices.

1 comentario:

Rafael del Barco Carreras dijo...

JOSÉ BONO Y URBIS VS. CAJA SUR O LA REBAJA DEL SUELDO A LOS FUNCIONARIOS.



Rafael del Barco Carreras



24-05-10. Si a diario se añade un nombre a la Gran Corrupción, no es menos cierto que nada hay nuevo bajo el sol. Las fórmulas son las de siempre. Cuando aun no ha terminado el juicio del Caso Hacienda de Barcelona, donde se acusa a Núñez y Navarro de abaratar unos pisos a favor de inspectores de Hacienda, nos salta que Reyal-Urbis hace lo propio con el presidente del Congreso. Urbis una de las inmobiliarias clave en “Barcelona, 30 años de corrupción” y por lo tanto en este juicio. A resaltar que los Núñez son una empresa privada productiva, y Urbis ha servido de siempre para que roben políticos y financieros.



Un comentarista añade a mi escrito de ayer sobre el citado en el juicio, Antonio de la Rosa Vázquez, y su hijo, el acusado Javier de la Rosa;

“sin duda nuestra gran
preocupación es tener un país limpio, algo difícil ya que a lo
largo de la historia siempre están
ahí”,

y no es que “estén ahí”, lo abarcan todo y prácticamente han arruinado el País.



Lo de Bono no deja de ser una más de las anécdotas que si me dejan huella (y al parecer no extrañan ni ofenden demasiado a la sociedad en general) es porque a mi por mucho menos ¡muchísimo menos! tras tres años de cárcel me condenan por encubrir a Antonio de la Rosa, pura corrupción la condena y cárcel. Pero existen tantos “bonos”, de derecha e izquierda, que alguien con mi propósito, es decir, entender mi propia vida y circunstancias, me desbordarían, y a decir verdad solo involucro a mis escritos aquellos nombres que remueven, si no ya la conciencia pública, si la mediática de unos atacando y otros desmintiendo o “encubriendo”. Fórmula ésta, la de las acusaciones cruzadas, que permite tejer un tapiz bastante completo de lo que sucedió o sucede.



Y sin relación aparente, aunque mucha a mi entender, se interviene Caja Sur. Otro nombre, Castillejo, un cura. De entrada se me ocurre que esa intervención, sumada a otras cajas y caixas, en lo que se ha llamado “intervenciones virtuales”, dejan sin sentido las cifras del famoso decreto en que se rebaja el sueldo de los funcionarios. Por de pronto, se dice, en Caja Sur 500 millones de euros, que serán el doble, triple o más. La Caixa de Cataluña de Narcís Serra, con cifras antes de la fusión de 60.000 millones de euros de “activos” y en práctica “intervención virtual”, necesita y necesitará tras la fusión más que los 15.000 millones de ahorro de las medidas anticrisis de Zapatero.



Algún creyente del Sistema me contestará que no tiene nada que ver la rebaja del déficit público con las regulaciones e intervenciones en el Sistema Financiero. Un empacho jurídico o de simples cursillos de economía conducen a esa conclusión. Pero en nuestro País, todo concluye en una “caja única”, Banco de España, y el Sistema Financiero no solo ha desestabilizado los ya imposibles Presupuestos Generales del Estado (o viceversa), sino amenaza acabar con ese “estado del bienestar” tan discurseado.



Nunca tan pocos acabaron con tanto esfuerzo ajeno.