27 julio 2010

SEÑORA OBAMA, BIENVENIDA A ESPAÑA

¡¡Bienvenida señora Obama!! Sí, mal que les pese a algunos. Porque hay quien ha criticado que dados los tiempos de penuria que estamos viviendo. Cuando hay gente que le falta para comer. La señora Obama, con algunos amigos, venga a España a disfrutar de unos días de vacaciones en un hotel de gran lujo. (Clic en el título si quieres verlo)
Me pregunto si quienes opinan así han renunciado a sus propias vacaciones, su cerveza, tabaco o gimnasio; para hacer donación de lo que eso cuesta a alguna ONG de las que atienden a los necesitados de este país. ¡Ja! Seguro que no, pero es muy fácil hacerce el bueno y el solidario a base de criticar a los demás. ¡Hipócritas! Vender es lo que quieren, pues hablar mal de los ricos siempre vende y en estos momentos mucho más.
Puede parecer escandaloso pagar varios miles diarios por un alojamiento. Pero yo no lo veo así, porque hago cuentas y lo que a un mileurista le puede parecer mucho, a alguien que ingresa más de dos millones anuales le puede parecer un precio razonable por la calidad que le ofrecen.
Y tampoco veo que sea malo para los pobres, que quienes no lo son, hagan uso de su bonanza económica tal cual les venga en gana, porque lo malo para todos, es esconder el dinero y no son pocos los que lo han hecho en estos tiempos. Esos son los que de verdad provocan escándalo, los que ofenden, hunden al país y arruinan a la gente que necesita trabajo.
Hay que ver el lado positivo de las cosas y, en este caso, es más que positivo. Diría yo que es de agradecer y, mucho, que la señora Obama nos visite. Porque eso supone que existimos en el mundo y, es una publicidad gratuita en los Estados Unidos que puede repercutir en un aumento del número de turistas de aquellas tierras a nuestro país. Lo cual es beneficioso, lo mires por donde lo mires.
Tener abierto un hotel como es Villa Padierna supone un alto costo, tanto en el cuidado de sus instalaciones como en los servicios que ofrece. ¿Qué significa? Puestos de trabajo, o sea, riqueza para quien goza de un empleo en ese lugar. Ya me gustaría a mí que la señora Obama, repitiese su visita con frecuencia. Que cunda su ejemplo, viniendo a visitar uno de los países de Europa que más necesidad de empleo tiene. A eso le llamo yo contribuir a paliar nuestra crisis.
No creo que sea algo poco meditado, sino todo lo contrario. Tampoco lo fue iluminar con los colores de nuestra bandera, el Empire State. Todo ello redundará en beneficio de nuestro país y, lo que es bueno para España, es bueno para mí. Aunque yo nunca me pueda permitir visitar ni de lejos Villa Padierna. Por cierto, es una maravilla.
Mis deseos golondrineros hoy son para la señora Obama. Bienvenida, señora, gracias por venir a España.

22 julio 2010

JULIO ME PROVOCA ESCALOFRÍOS

Ya a veintidós de julio, casi tres cuartas partes de mis vacaciones finiquitadas, tendré el resto en septiembre. Apenas he visto el sol, hace demasiado calor para levantar las persianas y, pocas ocasiones he tenido de pisar la calle. Ayer hice una de esas escasas salidas, para acompañar a alguien en su último viaje, a ese lugar al que todos iremos y ninguno regresaremos. Parece que el mes de julio es favorable para desplazarse, son muchos los que hacen turismo y, no son pocos los que cogen su último vuelo sin retorno.
Justo en esta misma fecha y estando de vacaciones, hace ya un lustro, hice el mismo recorrido presidiendo el cortejo fúnebre, me tocaba de cerca.
Tan de cerca que algo se fue con ella y no lo he vuelto a tener: El calor del amor materno. Esa sensación de acogida, de amparo y protección que desde que naces te regala una madre. Y si bien es cierto que con el tiempo parecen tornarse los papeles y, eres tú la que acoges a tu madre. En el fondo, en ese rincón que es de suponer que todos guardamos de nuestra niñez, seguimos necesitando ese calor.
Y no hay sol que lo sustituya. El frío que sientes por dentro al quedarte huérfana es imposible de compensar con nada. No acostumbramos a llamarnos huérfanos cuando ya somos adultos, pero lo somos si nuestros padres ya no están con nosotros.
Ese abandono te lleva a sentirte indefensa y tienes que crecer mucho interiormente para superarlo. No es fácil afrontarlo y, a mí me costó, sigo en un esfuerzo continuo por superar esa sensación de pérdida de mis raíces. El desarraigo me ha llevado a lo que hoy más me evita el frío, a escribir.
Y en eso paso mi tiempo, mis noches sin luna y estos días de julio que, aun siendo de altas temperaturas, en mí provocan escalofríos. Si bien no llego a sustituir lo que con ella se fue, encuentro en mis historias un apoyo, un norte que me ayuda a seguir hacia adelante. Muchos viajan en julio, también yo lo hago.
Decía Cervantes: “El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho”
Casi tiene el sonido del rodar de un tren. Y en él viajo, con la lectura y la escritura como compañeros de viaje. Visito ciudades y descubro paisajes inolvidables. Encuentro amistades, gentes de todas clases. Llego a sentir un calor especial que aún no siendo remedio total, me sirve para aliviar el frío de la soledad de mi orfandad.
Hoy es pronto, aún hay claridad, pero necesitaba hacer un alto en mi viajar, para decir una vez más en voz alta, lo mucho que la echo a faltar.
Y también hoy he terminado de corregir una de mis novelas y la he mandado a una editorial. Han aceptado valorarla. Puede que poco o nada bueno me digan, pero lo que sea me ayudará a sentirme satisfecha o a corregirme si tan mal está. Recordad el título “Lazos de Latón” por si la llegan a publicar.
Hasta pronto, golondrineros, sed felices.


19 julio 2010

BONO SE SEPARA... Y MÁS NOTICIAS

Pues bien, algo pasa con Bono. Hice un comentario, al cual os remito: Basta con hacer clic en el título y podréis leerlo. Sigo, sí, fue en el mes de mayo y, aunque yo apostillaba por dos posibles motivos para su cambio de look, en mi mente, uno tenía más puntos. Y no sé, el tiempo nos lo dirá, pero algo hay de novedad en la vida del señor Bono. De momento una separación de su esposa Ana, de mutuo acuerdo, eso sí, no vayamos a estas alturas a tirarnos la vajilla a la cabeza, ya somos civilizados, faltaría más. Ahí queda la noticia, que tampoco vamos de marujas, aunque nos encante, ¿no?
En fin, sembrar en primavera y en verano cosechar.
Lo dicho, vamos a estar pendientes del posible culebrón, porque nos resultará más ameno que ver a nuestro, Presidente, recibir o mandar que reciban, a “líderes” de más que dudosa inocencia en crímenes e injusticias de todo tipo en los países que presiden.
No vemos muchas noticias que nos hagan pasar el verano con la despreocupación a la que invita el estío. Todo lo contrario. Los no
representantes de la clase trabajadora de este país y, que hacen mucho por otras causas que no sean las que en realidad les incumben. Cobraron en 2009 del gobierno de Cataluña, según las noticias, la friolera de 31 millones de euros. Ahí es nada. Para la formación de los trabajadores, preferible activos ¿? Está claro que somos un país en el que la formación es realmente muy cara para los resultados que obtenemos. ¿?
Por otro lado y, volviendo al señor Bono, seguimos sin que nos aclaren si todas esas historias de incrementos
patrimoniales eran o no ciertas. Bueno, ya se verá, al final todo se aclara, cuando se quiere aclarar.
“No hay huelga de controladores” No la hay, por supuesto. Pero al parecer les ha dado un ataque viral a muchos, en estas fechas es bastante corriente que los virus nos invadan, incluso que sean selectivos y prefieran a los controladores aéreos. Para, jo...robar a los que han decidido utilizar los aviones en sus desplazamientos. Bueno, es algo que no me afecta. Yo tomo el vuelo que quiero y a la hora que me viene en gana. Siempre vuelo por
Internet, aun así prefiero el barco. Entre no saber volar ni nadar, pienso que lo de nadar puedo tenerlo más fácil. Por cierto, han inaugurado una línea entre Livorno y Valencia. Es decir, de Valencia a la Toscana, en poco más de un día disfrutando de un mini crucero. El ferry se llama “Sorrento”¡¡¡Guay!!! Algún día me apuntaré de verdad.
Lo de los cubanos, mejor no
mentarlo. De pena, pero bueno, es un paso. Aunque ya pudieran, todos aquellos que tienen tan buenas relaciones con el gobierno cubano, intentar que ese paso fuese algo más positivo. Está claro que es mejor estar deportado que preso, pero no deja de ser una miserable muestra de un cambio que aún no existe. Y, mira, hay quien le ríe las gracias. Vivir para ver.
Bueno, ya acabo con las noticias que voy leyendo en los medios, porque todo esto que os cuento lo voy sacando de la prensa que hay en la red. Me he dejado una para finalizar porque tiene su aquel. “Un posible regreso a la política, en vivo y en directo, de
Felipe Gonzalez” Sí, tal cual, se dice, se comenta y... no me extrañará. Porque con los vientos que corren tendrán que echar mano de un peso pesado para poder evitar el descenso vertiginoso del globo en el que viaja el partido en el gobierno. Sí, en las nubes, porque poco tocan tierra.
Pero, atentos, eso puede necesitar que en el otro lado, léase
PP, pongan otro púgil, por aquello de equilibrar el peso. Ya veremos en qué depara esto. Es posible que sea solo fruto del vino con sifón, al que tan aficionados son algunos.
Yo como soy de
limoncello, siempre tengo otra visión, no mejor, ni peor, pero es mía y la manifiesto en ejercicio de mi libertad de expresión.
Felices vacaciones, me queda menos de una semana.
Ciao.

16 julio 2010

ZAPATERO, RAJOY, Y, EL RESTO ¿POR QUÉ NOS OS CALLÁIS?

Sí, de verdad, esto es muy serio y esta gente sigue jugando un partido que perdemos todos. Están fuera de juego, pero quienes lo vemos somos los sufridos espectadores y, no tenemos más arma que la paciencia con la que día a día les aguantamos y, por tanto, no podemos sacar la tarjeta roja para expulsarles. Hace mucho que se acabó el tiempo, la prórroga y los penaltis y, sin embargo, ellos siguen jugando y, además, del peor modo posible.

Contagiados por la resaca del mundial hemos escuchado toda una serie de frases con más o menos acierto, tal cual las que yo misma acabo de escribir. Porque, en general, aunque parece que lo tomen en serio, no es así.

Es evidente que para una mayoría esto es un juego, el suyo y, utilizan la estrategia que más conveniente creen para sus intereses, particulares o partidistas. Pero el interés de esa España, tan cacareada estos últimos días, ahí queda, justo en último lugar, a pocos o a nadie importa. Y nos hemos sentido con cierto orgullo de poder gritar libres de recriminaciones ¡¡ESPAÑA, ESPAÑA!! tal que fuese una exclamación unánime, con sentimiento y sentido de patria.

¡Falso! No existe tal, aquí ni hay patria ni patriotas.

Solo hay, por un lado, políticos. Partidos que estudian de qué manera pueden alcanzar el poder o mantenerse en él, a costa de lo que sea.

Por otro están los que comercian, cuyos intereses son básicamente económicos y que claman porque cambie la situación pero poco o nada hacen para lograrlo. Aún así tengo que preferirlos a los primeros, porque por lo menos sabes su objetivo, no ocultan su verdadero interés, hacer caja.

Y luego estamos la manada, no de toros, que siempre ha sido el símbolo de este país. Ahora ya no les gustan los nobles toros de lidia, no interesa que sepamos luchar. Es necesario que seamos un rebaño de borregos, mucho más fáciles de manejar. Basta con unos cuantos perros bien adiestrados que al son de un par de silbidos o alguna voz, controlan el rebaño. Les llevan a la huelga general o les mantienen callados durante un par de años, así revienten.

Y eso es lo que hay. Nada más. Sí, quizá alguna voz que clama en un hemiciclo sordo y provoca alguna burla por ir en solitario.

Con la euforia de la victoria en el futbol, la cual celebro sin olvidarme, aún sin saber, los millones de euros que nos habrá costado en plena crisis. Más en pleno mes de julio, en que, aún sin poder, la gente está de vacaciones y, por tanto, con pocas ganas de políticas. El debate sobre el estado de la nación le pasará a mucha gente inadvertido, amén, de que ya están hartos de oír siempre lo mismo. Es decir: palabras mudas. Vacías de contenido real, porque de nada sirven las palabras cuando no se quiere llegar a ninguna parte. Ganar tiempo es lo que pretenden, unos y otros.

Cuando, tiempo, es precisamente lo que ya no nos queda.

Muchos hemos sentido un cierto orgullo por la victoria de la Selección Española.

Y muchos más somos los que nos sentimos avergonzados de la clase política, de su altanería y egoísmo. De su hipocresía y del abuso que hacen de la confianza que el pueblo les dio.

A estas alturas, muchos políticos, ya creen que están ahí por sus “méritos”. Han olvidado que es el pueblo quien les concedió el privilegio de representarles y su misión era y es, atender los intereses de este país y de sus gentes. No los suyos ni de sus partidos.

No cumplen con la misión que les encomendamos y debiéramos, el pueblo, demandarles por ello. Pero también nosotros somos culpables, por borregos. Por ese gregarismo del que hacemos gala, que les permite manipularnos mientras nos arruinan a todos.

Ya me he cansado, no quería escribir sobre esto y, aquí estoy en la madrugada. Pero es que me cabrean, bueno, en realidad no es cabreo. Es vergüenza ajena, por lo indigno de su proceder.

Buenas noches golondrineros, sigo de vacaciones y, al igual que siempre, de crucero, navego por Internet. Es más barato, no hay retrasos y no te pierden la maleta. Un chollo.

Sed felices. Ciao.


12 julio 2010

¡FELICIDADES ESPAÑA!

Enhorabuena a todos los componentes de nuestra Selección, detrás de los jugadores hay una serie de personas que merecen también la felicitación, porque es evidente que no son sólo las figuras las que consiguen los resultados. Es la labor de todo un equipo, la unión que hace la fuerza. Han merecido ganar por su buen hacer, han jugado al futbol sin perder los nervios y con la deportividad que les caracteriza. A pesar del oponente que ha preferido intentar romper el juego y, un árbitro que andaba de psicólogo propiciando que la naranja mecánica siguiese con sus chapucerías, han equivocado la estrategia, porque se trataba de jugar futbol, no de dar golpes.
No ha sido el mejor partido pero es el que ha dado el triunfo final. Tienen madera de campeones, lo han demostrado y, esta vez el resultado es justo, que no siempre lo es en el
futbol.
Ver llorar a
Iker Casillas o la emoción contenida en los ojos de Andrés Iniesta, es muestra de una humildad que les hace más grandes. El entrenador, señor Del Bosque, ha elogiado los valores y principios de los jugadores. Eso es lo que se nota, lo que les diferencia y les da la talla de auténticos campeones.
Ojalá esos valores sean imitados por los chavales que aún a estas horas andan haciendo sonar las bocinas y dando vítores. Líderes con valores y buenos principios hacen falta en este país. Un ejemplo de que con trabajo y franca camaradería de un equipo pueden lograrse objetivos.
Falta para rematar el mundial, el
recibimiento, la vuelta a casa con el trofeo. Seguro que es apoteósico, se lo merecen y el país lo necesita, algo grande para celebrar. Decía uno de los comentaristas que puede parecer estúpido, con todos los problemas que hay, emocionarse por este tema. No, no lo es, todos necesitamos ilusiones del tipo que sean. El futbol, cuando se trata de la Selección de España, es motivo de compartir con quien ni siquiera conoces, algo que nos une. Y en esta ocasión ha propiciado una alegría general y, eso siempre es positivo, por trivial que pueda parecer. Hacía falta una ración de alegría, esperemos poder ir aumentándola.
¡Felicidades España! ¡Felicidades a todos los españoles!

Buenas noches golondrineros. Voy a tomarme el limoncello. Ciao.

11 julio 2010

ESPAÑA ES UNA FIESTA. ¿QUIÉN QUIERE LA INDEPENDENCIA?

España es una fiesta, diversa, porque diferentes son los pueblos que la componen. Mientras en todos los pueblos de, España, una gran mayoría vitorea a la Selección de futbol. En Pamplona, otros muchos corren delante del toro para demostrar... Pero les gusta y, es tradición que va en aumento en número de participantes, pluralidad de razas, lenguas y nacionalidades. Además de que muchos, en toda España, vemos por televisión tan arriesgado deporte-tradición o como quiera cada cual calificarlo.
En otra parte de, España, en Barcelona, un porcentaje numeroso, pero no mayoritario, se manifiesta. Según las cifras (entre millón cien mil y millón quinientas mil personas) no han llegado al porcentaje de los que votaron SÍ al
Estatud, que ya fue minoritario con respecto a la población total. Los manifestados representan el veinte por ciento, de los 7.475.420 habitantes que tiene Cataluña. Pero al igual que cuando hay elecciones, todos han ganado, ha sido un éxito la convocatoria. Desde luego los políticos estaban en mayoría. Unos porque sí y, otros, porque no digan. Pero no han sido capaces ni de ponerse de acuerdo en el lema de la convocatoria. Que, en teoría era para protestar por la sentencia del TC y ha resultado, según cuentan, una defensa de la independencia de Cataluña.
Dicen que han silbado al Muy Honorable señor Montilla, no eran de admiración los silbidos al parecer. ¿Por qué eran? Quizá por muchos de los afectados de este invierno por las nevadas, que se quedaron sin luz y que aún no han cobrado nada. Puede ser, el señor Montilla no tiene que pagarles, pero tampoco lo hace la compañía eléctrica, les da
laaaargas. Y mientras, el presidente, que es político de profesión y, al parecer de vocación, se manifiesta en contra de una sentencia que no tendría que haberse producido si hubiesen redactado el Estatud conforme al derecho vigente, guste o no, es lo que hay y tenemos que respetarlo todos. Puede comprenderse el error, de ser cierto que no terminó sus estudios de derecho. Pero para eso están los asesores y, hay que ser prudentes porque es un auténtico despilfarro de dinero, tiempo y también de vender falsas ilusiones.
En fin, me queda claro que un porcentaje minoritario de catalanes quiere la independencia. Los políticos en su mayoría, por lo menos de
boquita. Aunque no debieran, se supone que representan los intereses del pueblo ¿no? No, al parecer no.
Esta nación, que es España, con todos los pueblos que la componen, cuya diversidad y legal autonomía debe ser respetada. No está necesitada de falsos líderes que confunden sus intereses, ideas utópicas y criterios sociológicos propios, con los que la gente necesita o quiere. Y tratan de imponerlos a toda costa aprovechando su momento de poder.
Mientras todo esto sucede, sigue aumentando la corrupción y la lidia insidiosa entre los partidos. Disminuye la
credibilidad de la clase política y de las instituciones democráticas, gracias a esas declaraciones de unos y otros cuando no les interesan los resultados. Este país no sólo tiene una crisis económica sin precedentes (hay quien la compara con la posguerra) La crisis de la calidad de nuestros políticos, en general, es más aterradora. Porque de sus decisiones dependemos todos, los que tenemos trabajo y los millones de españoles que lo necesitan.
Pero tranquilos,
golondrineros, hoy es fiesta en España entera. Hoy sí, mañana ya veremos lo que nos espera. Vivamos el presente y, no es otro, que el mundial. Yo me uno al grupo de:
Todos con la Selección Española. ¡Qué viva La Roja! WAKA WAKA

10 julio 2010

ESPAÑA, LA MARCA QUE VENDE.

Llegó la hora definitiva, mañana once de julio del año 2010 será una fecha histórica para el deporte rey, para todos sus seguidores y, por ende, para el resto del país. De hecho ya cuenta la Selección Española “La Roja” con el nada despreciable título de subcampeona del mundial, aunque el resultado no llegue a ser el deseado por todos.
Y tenemos que dar las gracias a todo el equipo, por su buen hacer, su deportividad y la entrega. Cualidades que deseamos se extiendan a otros ámbitos del país que andan escasos de ellas. Y también hay que dárselas, porque, han conseguido que estos días todos seamos de España, olvidando rencillas entre personas, comunidades o partidos políticos. En algo estamos de acuerdo y, no resulta agravio para nadie ver la bandera española ondear en ventanas, balcones y vehículos. El espíritu patrio, de tan poco arraigo en esta tierra, resurge con fuerza denodada invadiéndolo todo. Hay una alegría generalizada que tanta falta hace dado los tiempos que corren. La gente habla de futbol aun no siendo aficionado.
Surgen anécdotas de todo tipo en relación al acontecimiento. Por mencionar algo, lo del pulpo, que en mi ignorancia y, pensando que nuestro carácter, el español, da pie a toda clase de supersticiones, me tronchaba por la ocurrencia. Convencida de que era cosa de los gallegos, por aquello de las meigas y el pulpo a la gallega. Aún no he salido de mi sorpresa, ¡un pulpo alemán adivino! Conforme tienen fama, los teutones, de ser serios y eficaces; esto del pulpo me ha sobrepasado. Si aquí, en España, hubiese aparecido en cualquier rincón el dichoso pulpo, nos habríamos reído con ganas todos. Pero siendo alemán, la cosa es seria, hay que tenerlo en cuenta. Al igual que su cancillera, señora Merkel, que pocos pasos da en falso; el pulpo, seguro es eficiente.
Y no solo sirve el futbol para distraer al personal, como en tiempos de Franco. Esto del mundial es una publicidad extraordinaria, en positivo, para España. La marca España se revaloriza y tanto si ganamos como si no, haremos caja. Vendrá más gente a vernos, porque a pesar de todo, vamos de ganadores. La Selección vende con su excelente imagen. Su Majestad, doña Sofía, al igual que los Príncipes de Asturias que también irán a la final, junto con otras personalidades; nuestro Nadal será uno de los que acudan. En fin, todo ello junto, impulsando la imagen de España por el mundo entero. Y esto significa hacer caja a corto, medio y largo plazo.
Ya hay quien está con la calculadora en la mano, cifran en más dos millones los visitantes que vendrán, gracias a esta historia. Incluso, nuestro ministro de industria, comercio y turismo; don Miguel Sebastián augurá, cual pulpo, que tendrá una repercusión que irá más lejos, impulsará la salida de la crisis. No ha sido así de explícito pero lo ha dado a entender, tendrá sus razones.
De momento, hay quien ha triplicado el horario en su fábrica de banderas españolas. Ha hecho caja.
O sea, la Selección Española “La Roja” cual abono orgánico, hará brotar por fin los brotes verdes.
Se nota, se siente en el ambiente y en la gente, que la Selección es nuestro ariete de la suerte. Falta nos hace.
Semana de encierros de San Fermín, ahí vemos cada día a la raza española que no se amedrenta frente a los miuras. Vencerá a la crisis, a la naranja mecánica y a todo lo que haga falta, con pulpo o sin él. Y aunque así no sea, ya hemos ganado lo disfrutado.
Buena suerte para nuestro equipo nacional, el de todos los españoles.
Buenas noches, golondrineros, sed felices y no olvidéis celebrar el mundial con limoncello.

07 julio 2010

¡GORA SAN FERMÍN! VIVAN LAS FIESTAS DE NUESTROS PUEBLOS

Hoy quiero contaros un cuento. Parece ser que hay un poco de lío entre el cuento y el relato. ¡Y, a mí, qué! No tengo problema, porque el cuento lo relato. Comenzaré la historia tal cual se hacía antaño, imaginad que estáis sentados junto al lar, chisporrotea el fuego. La mirada clavada en las llamas que danzan y forman figuras, caras... Y el abuelo os cuenta...

Érase una vez: Cuando yo era casi tan joven como vosotros, porque yo, no siempre he sido abuelo. Fue en el verano, entonces el verano no era para estar de vacaciones ni ir de viaje, teníamos que trabajar, había trabajo y mucho, aunque poca paga. Pero también íbamos de fiesta, a todas las de la comarca. Cómo podíamos, en carro, en bicicleta. Algunos tenían moto, pero eran los menos; uno de ellos, Fernandino, el hijo del boticario. Pero la mayoría hacíamos el camino “A San Fernando” un ratito a pie y otro andando campo a través. Cuando llegabas a la plaza del pueblo, que era donde celebraban la fiesta, ya llevabas la camisa sudada y arrugada, a menos que hubieses tomado la precaución de quitártela durante el trayecto.

El caso es que de todas partes acudía la gente y, nos íbamos encontrando a conocidos o parientes. Cuadrillas enteras por sendas, caminos y atajos. Mis amigos y yo, decidimos que teníamos que llegar bien apañados, llevábamos intención de conquistar a unas mozas, con las que ya habíamos hablado en varias ocasiones y teníamos comprometido un baile. Así que decidimos ir con la ropa de trabajo, entonces no teníamos tantas mudas como ahora, una o dos a lo sumo para trabajar y, una especial para domingos y festivos. Cogimos un hatillo al hombro con la ropa de más vestir y los zapatos. Yo tuve los mismos zapatos durante, ya no recuerdo, ocho o diez años. Mi madre me los compró tres números más grandes con la idea de que me valiesen para el crecimiento, al principio llevaba unos retales en la punta. Por supuesto que si llovía o había barro te los quitabas para no estropearlos.

¿Por dónde iba? Sí, sí, ya lo recuerdo, el día aquel de la ropa. Llegamos a los aledaños de Fuente Sana, ya se oía la música de la procesión. Eso era lo primero, el pueblo entero participaba, por entonces todos teníamos el mismo Dios y las mismas costumbres de iglesia y, pobre del que no cumpliese con recato o faltase a la misa. En la iglesia, nada indecoroso podían las mujeres llevar, la cabeza cubierta con el velo; los hombres, descubierta como manda el protocolo y las mangas no podías remangarlas aunque fuese día de poniente. Pensamos que lo mejor era lavarnos un poco y así llegar limpios por fuera y por dentro, teníamos tiempo mientras duraba la procesión, porque no siendo del mismo pueblo no había obligación de asistir, a cada cual lo suyo.

Existía por entonces una alberca que decían que era del tiempo de los moros. Nos vino darnos un chapuzón, el agua estaba fresca y nos pasamos un buen rato haciendo gansadas. Ya refrescados y dispuestos a conquistar a las mozas, salimos para vestirnos y nuestra sorpresa fue encontrarnos sin los hatillos ni la ropa que llevábamos puesta. Como Dios nos trajo al mundo estábamos, quiero decir que con las vergüenzas al aire, porque ninguno tenía un bañador de esos que tenéis ahora media docena. Nadábamos en calzón de normal, pero dadas las circunstancias no llevábamos más que uno, que tampoco teníamos tantos como vosotros. Yo recuerdo, de siempre, dos grises y uno blanco, el blanco por supuesto para la fiesta. Ya os podéis imaginar la cara que se nos quedó. Cuando, de fijo, en cuanto tenías oportunidad te estabas riendo tomando medida del asunto, por ver quien orinaba más lejos o la tenía mayor. Pero en ese momento no nos reíamos, todos tapándonos con una o con las dos manos. El que la tenía más larga era Nicasio, el corto le llamábamos, porque era corto de entendimiento. Pasados los años fue alcalde una temporada, tuvo mala suerte ese chaval, se cayó de la higuera y allí se quedó con el cuello partido.

El caso es, que no podíamos ir al pueblo de esa guisa, ni volvernos para casa. El cabreo que teníamos era de órdago, ni pensar que nos dejaba. Además, muertos de miedo por si la guardia civil nos pillaba en esa situación. Al Gregorio, que era el más avispado, se le ocurrió la solución. Tenía talento, llegó a conductor ferroviario, en Madrid vivía, si no se ha muerto. Los de la banda de música siempre se cambiaban de ropa en un corral que no estaba lejos, era de las últimas casas del pueblo o de las primeras según vayas. Gregorio pensó que uno se llegase allí y cogiese la ropa de los músicos. Nadie quería ir voluntario y lo echamos a suerte. A mí me tocó. No recuerdo haber pasado peor rato que ese. Llegué al corral, la puerta siempre estaba abierta; nadie cerraba las puertas, no ya de los corrales, ni de las casas tampoco. Entré y miré, nada, los animales solos estaban. Me acerqué al cobertizo y allí estaba la ropa. Me disponía a cogerla cuando sonó un chasquido, me giré y casi me caí muerto. Una de las mozas con las que pensábamos encontrarnos, allí estaba, vestida de ceremonia, con teja y mantellina. Me miró sin pestañear, bien mirado y, yo, tieso como un palo, ni a respirar que me atreví. Un siglo me pareció que duraba aquello, cuando se cansó de mirarme siguió adelante y entró en la casa. Aún tardé en reaccionar, pero lo conseguí, volví a la alberca con ropa para todos. Pero me olvidé de las albarcas y descalzos regresamos a nuestro pueblo. Sin fiesta y sin ropa nos quedamos, nunca supimos nada. Pensamos que debió ser un buhonero que solía venir por esas fechas a vender baratijas, porque por más que revisamos a todos en otras fiestas, nunca vimos una de nuestras prendas.

Y esa es la historia. Ya casi me olvidaba, lo bueno de aquello, porque siempre tienes que sacar la parte positiva de las cosas; fue que, el único que consiguió una moza de las que nos gustaban fui yo. Me casé con vuestra abuela, ella y, no otra, fue la que me vio las vergüenzas aquel día. La única mujer que conocí, quitando de La Murciana, a la que fuimos en cuadrilla para la primera vez, pero esa no contaba para casarse ni para nada más que no fuese lo que hacía. Entonces no era como ahora, que conocéis a tantas.

Recuerdo que yo no me atrevía a acercarme a ella, después de aquello. Fue ella la que se acercó un día y me dijo muy quedo: “Aún me debes un baile, ¿lo has olvidado?”

Y colorín, colorado, este cuento o relato ha terminado.

No lo vuelvas a leer sino te ha gustado.

Casi buenos días golondrineros, estoy de vacaciones y he prolongado la noche. Hoy es San Fermín, fiesta a la que acuden muchos de otros pueblos, como antaño, conservar nuestras costumbres no es tan malo. ¡Gora San Fermín! Ciao.